Capitulo 1(40)
Abrí los ojos de golpe y me encontré sentada en una
de las incomodas butacas del avión. Aun estaba en el avión, ¿Qué raro no? Me
preguntaba una y otra vez. Todo lo que me había pasado con Louis, Liam,
Danielle y demás, todo, había sido un sueño. Suspiré de nuevo, había sido un
sueño tan real, tanto que creía que era verdad.
Normalmente cuando soñaba notaba que estaba en un
sueño, sobre todo por lo imposible de mis sueños, pero esta vez todo me había
parecido tan… tan de verdad, pero la verdad es que, ahora que lo pensaba, si
que era un poco imposible.
Busqué a tientas el cinturón de seguridad y me lo
abroché. Miré hacia mi derecha y ahí estaban, mis dos amigas, con las que
también había soñado. DIOS, la cabeza me daba vueltas y más vueltas.
“ESTAMOS ATERRIZANDO EN LONDRES, LA TEMPERATURA ES
DE DIECINUEVE GRADOS CENTIGRADOS, DISFRUTEN DE SU ESTANCIA AQUÍ”
-London here we are.-gritó
Irene a mi lado.
-Yeah baby!-grito Lucia.
Noté sus ojos pasados en mí, esperando a que dijese
algo pero yo aun seguía aturdida por el sueño que había tenido.
-Aun estoy medio dormida.-me disculpe intentando parecer
alegre y… bueno recuperarme, por asi decirlo.
Bajamos del avión, Lucia e Irene parecían
histéricas gritando por cualquier cosa y diciendo lo increíble que era todo lo
ingles. Yo caminaba detrás de ellas con la cabeza aun dándome vueltas, y además
tenia unas fuertes palpitaciones en el lado derecho. En resumen, ese sueño me
había dejado echa una mierda.
Fuimos a por las maletas y nos dirigimos hacia la
casa que habían alquilado nuestros padres para que pasásemos los tres meses de
verano en Londres. Llegamos al bloque de viviendas en el que íbamos a vivir
durante los siguientes dos meses. A mi, sinceramente, aun me parecía increíble
que mis padres me dejasen ir a Londres a vivir con mis amigas durante tres
meses con solo quince años, pero supongo que las expectativas de que aprendiese
el idioma les influyeron.
El primer día estuvimos por el Big Ben y el Golden
Eye. El segundo día visitamos varios museos. El tercer día estuvimos paseando
por las calles del centro de Londres mirando las tiendas de ropa que había a
nuestro alrededor, aunque fuesen muy caras. Ya habíamos visitado casi toda la
zona turística de Londres y no había vuelto a recordar ese sueño, excepto en
mis sueños, aun asi tenia muy claro lo que quería hacer en nuestro cuarto día
de visita a Londres.
-Vamos a ver la torre de Londres, y el puente y…
-¿Qué?-dije
yo, quizás demasiado alto. Ambas se giraron para mirarme.-Yo quería ir al
Milkshake y a Nando’s.
-No vamos a ir a esos sitios.-me dijo Lucia en un
tono borde.
Por si no se nota, yo os aclaro algo. Lucia y yo
somos súper amigas, pero discutimos bastantes veces, y la mayoría de por
tonterías como esta.
-¿Por qué no vamos a ir?-le pregunté alzando la
voz.
-Pues porque no.-dijo cruzándose de brazos.
-Pues muy bien, -empecé a decir. Comenzaba a
cabrearme.-haced lo que queríais, pero yo me voy al Milkshake.
Di media vuelta y me alejé de ellas caminando. Oía
como me llamaban y me decían que volviese. Temían que me perdiese, y yo también
temía perderme, pero en ese momento no quería saber nada de ellas. Si no me querían
acompañar al Milkshake que hiciesen lo que les diese la gana, pero no me iban a
arrastrar a donde no quería ir.
Comencé a callejear, y hubo un momento en el que
estaba realmente perdida. Me había adentrado en un barrio que no tenia muy
buena pinta y muchos chicos me silbaban y me decían cosas groseras, yo
continuaba andando como si no les escuchase, pero en mi interior se me estaban
congelando de terror los huesos.
Seguía caminando por las calles, pensando la forma
de volver a encontrar un lugar un poco mas seguro para mí. De repente las casas
que había a mí alrededor comenzaron a tornarse mas decoradas con grandes
jardines llenos de flores y los céspedes bien cortados. Por fin había
encontrado un sitio mas seguro. Estaba en un barrio más pijo de Londres y
suspiré aliviada cuando noté que el terror se iba separando de mí.
Seguí caminando insegura por las calles hasta que
la gente que paseaba a mí alrededor iba aumentando. Estaba en el centro de la
ciudad, por ahí tenia que estar el Milkshake. Seguí caminando y cinco minutos
más tarde lo encontré.
Entre dentro. No había mucha gente. Estaban
ocupadas un par de mesas y había dos chicas esperando en la cola. Di una vuelta
por el restaurante y me paré en frente de una foto. Hay estaban, mis cinco
chicos. Suspiré, dudaba encontrármelos, y aun no estaba segura de querer verlos
después de mi sueño. Aun asi el deseo de conocerlos seguía latiendo en mi
interior como una llama que nunca se apaga.
Me puse en la cola y pedí un batido de 1D,
evidentemente. Me lo trajeron, lo pagué y me senté en una mesa. Estaba
aburrida, estaba demasiado acostumbrada a que siempre que entraba en un lugar
como ese lo hacia con mis chicas y siempre había un tema de conversación o algo
para que pudiéramos hacer el tonto.
Empezó a sonarme el móvil, con la canción What
Makes You Beautiful de mis cinco chicos. Intenté sacar mi móvil del bolsillo
estando sentada pero no era capaz. Me levanté rápidamente justo cuando
comenzaban a cantar.
-You’ re insecure; don’t
know what for.-oí en directo.
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