jueves, 15 de marzo de 2012

Nobody else 10


Capitulo 10

(Narra Laura)
La comida estaba muy rica. Era eso o que yo tenía demasiada hambre después de haber estado corriendo. Creo que era la segunda opción ya que me sentía destrozada.
Después de comer, de recoger la mesa y de fregar los platos decidí ir a dormirme una siesta, yo nunca he conseguido dormirme.
-Lu, me voy a dormir que estoy muerta. Despiértame a las cinco menos cuarto para poder llegar al aeropuerto.
Subí a mi habitación y me metí directamente en la cama, sin cambiarme de ropa.
En ese momento me puse a pensar en todo lo que me había pasado en solo tres días.
Había llegado a Londres, una ciudad preciosa donde siempre había querido ir.
Había conocido a One Direction, mi grupo de música favorito.
Había vuelto a ver a dos de mis mejores amigas, alas que hacia seis meses que no veía.
Me había enamorado de Liam, un famosos, una persona que solo tres días atrás yo había pensado que no estaba a mi alcance, y que aun saliendo con el seguía pensando que no estaba a su alcance.
Eran tantas cosas las que me habían sucedido en tan poco tiempo, que en ese momento, estando tumbada en la cama, pensé que era un sueño. Un sueño de verdad, como todos los que había tenido con One Direction antes de conocerlos, si es que los había conocido de verdad.
Me sentía muy confusa. No estaba segura de querer creerme que estaba en la realidad. Me costaba asimilar que todo lo que me había ocurrido no era un sueño.
-Laura.-me dijo alguien al oído.-Laura tienes que levantarte para ir a recoger a David al aeropuerto.
Abrí los ojos de golpe y me encontré con la mirada de Liam. Me encantaban esos ojos color caramelo.

(Narra Liam)
Se despertó de golpe, y en un principio me asusté, pero en cuanto me vio se relajó. Me agarró del cuello y me besó suavemente.
Se sentó en el borde de la cama y se restregó los ojos para desperezarse.
Se levantó de la cama y se dirigió hacia la puerta. La seguí hasta la puerta y le tome de la mano.
La arrastré escaleras abaja hacia el salón.
Niall, Louis, Zayn y Harry estaban viendo la tele. Se oían unos ruidos que venían de la cocina, seguro que eran Irene y Lucía.
Laura se fue a la cocina con sus amigas y yo me senté en el sofá al lado de Harry.
Se me quedó mirando, y cuando quise darme cuenta todos me miraban fijamente
-¿Se puede saber que pasa?-les pregunté confusos.
-Liam, ¿te has mirado el cuello?-me preguntó Louis.
Baja la mirada hasta el cuello de mi camiseta pero no veía nada.
-¿Que tengo?-les pregunté nervioso.
Niall se levantó y cogió un pequeño espejo que había encima de la mesa, supuse que era de Lucía. Me lo entregó y yo me miré el cuello.
Tenía una gran marca morada. UN CHUPETON. Laura me había echo un chupetón.

(Narra Laura)
Entré en la cocina y me encontré con Lucía e Irene buscando algo en los armarios de la cocina.
-¿Que buscáis?-les pregunté y se asustaron. Al parecer no me había oído entrar.
-Nada, una sandwichera.-me dijo Irene.
-Cierto,-corroboró Lucia- pero aún no la hemos encatrado y los chicos nos han dicho que tenían que tener una por lo cocina.
-Ya, bueno. Pues daos prisa que tenemos que ir a por David.
-Si nos ayudaras acabaríamos antes.-me dijo Irene sacándome la lengua.
-Ya pero, como sabéis, soy tan vaga que no voy a ayudaros.
Se abrió la puerta de la cocina y entraron Harry, Zayn y Liam.
-Muy bonito el regalito que le has echo a Liam.-me dijo Harry riendo pícaramente.
-¿Regalito?-le pregunté confusa, entonces recordé algo que había echo.-ah, ya sé. Le marque como mio y solo mio.
Liam se acercó a mí y me agarró por la cintura. Pegó su frente a la mía.
-No tenías que marcarme, ya soy tuyo y solo tuyo.
Pegó sus labios a los míos. Nuestros labios solo se rozaban, pero ese mínimo contacto hacia que miles de descargas bajasen por mi espalda. Me pegué a él y empecé a besarle de verdad. Primero suavemente y, finalmente, con mas ritmo. Notaba como se nos aceleraban los corazones y latían al unísono. Sus besos eran la mejor sensación que nunca había sentido.
Bajó sus manos, que habían estado en la base de mi espalda y me cogió en brazos para sentarme en la encimera. Comenzó a bajar por mi cuello con suaves besitos hasta que sentí como presionaba fuertemente. Me mordí los labios para no gemir pero creo que si que lo hice porque en seguida se abrió la puerta de la cocina y Liam se separó de mi.
-Te he echo un regalito.-me dijo con una sonrisa picara.
-¡No! ¡Me has echo un chupetón! ¿Por qué?
-Porque eres mía y solo mía.
-Pues ahora si que no.-le dije sacándole la lengua. Me bajé de la encimera y me acerqué a Niall que acababa de entrar en la cocina.-Ahora soy solo de Niall.
Cogí a Niall por la cintura y me estreché contra su pecho.
-Bueno......., en realidad soy de David, que, por cierto, tenemos que ir ya a por él al aeropuerto.-dije acordándome.-Adiós chicos.-me despedí de todos y le saqué la lengua a Liam.

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